La vida útil y el rendimiento de las sierras cintas depende en gran medida del material del que éstas sean elaboradas. Sin embargo, la operación de la hoja de sierra cinta también influye en la durabilidad de la misma. Por ello, se comparten los cinco principales errores identificados por técnicos y operadores de sierras cintas.

  1. No saber el paso de diente que necesito para cortar

El paso del diente se mide en el número de dientes por pulgada (DPP), o por su siglas en ingles Tooth per Inch (TPI), que hay en la sierra cinta. Se distinguen entre dos tipos:

a) Paso de diente constante: es ideal para cortes con sujeción eficiente y en aceros de alta aleación o exóticos. El espacio entre los dientes es constante en toda la longitud de la sierra cinta. Ejemplo: 2DPP, 4DPP y 8DPP.

b) Paso de diente variable:  tiene el objetivo de reducir la vibración y la resonancia durante el corte, comúnmente presentado en corte con atados, paredes delgadas y materiales con sujeción floja. El espacio entre los dientes es variable dentro de un intervalo. Ejemplo: 1.1/1.5 DPP, 2/3 DPP y 10/14 DPP.

Si el material a cortar es de grandes dimensiones, es necesario que el espacio entre los dientes sea mayor. Así la sierra tendrá mayor capacidad para almacenar viruta en la garganta del diente, sin que esta se solde en la punta del diente.

  1. No asentar la sierra cinta

Una sierra cinta nueva cuenta con una gran cantidad de dientes, cada uno de ellos siendo una herramienta de corte independiente y afilados con precisión. Cada diente tiene filos vivos susceptibles a daños y deben ser tratados con delicadeza cuando la sierra cinta es nueva.

Una buena comparación es la de un lápiz recién afilado. Si al inicio nos apoyamos con fuerza al escribir, lo más probable es que rompamos la punta del lápiz. Comúnmente lo que hacemos es aplicar una fuerza ligera al comenzar a escribir y progresivamente aumentarla conforme se forma un pequeño radio en la punta del lápiz. 

Este mismo principio debemos aplicarlo con una sierra cinta nueva. Se busca generar pequeños radios en las esquinas de los dientes, comúnmente conocidos como matar filos. Esto nos dará un mejor punto de apoyo en los dientes para poder cortar el material.

  1. Cortar sin cepillo

El cepillo tiene la importante tarea de remover la viruta soldada de las puntas de los dientes, esto para que el diente esté listo para el corte y la garganta se encuentre despejada y pueda recolectar viruta nuevamente. Es un elemento que juega un papel fundamental en la vida útil de la sierra cinta.

A diferencia de otras herramientas de corte como la broca, por ejemplo, la sierra cinta no es capaz de desalojar la viruta al instante del corte. 

Conforme la broca va barrenando, la viruta asciende por las flautas y sale del barreno que se va abriendo. Es importante que el cepillo sea capaz de remover la viruta antes de que el diente entre nuevamente a la zona de corte para que pueda recolectar más viruta.  De lo contrario, se pueden obtener cortes desviados, dientes rotos, cintas desdentadas y una drástica disminución en la vida útil de la sierra cinta, hasta un 30% menos, en el mejor de los casos.

Para evitar esto, el cepillo debe encontrarse en buen estado, asegurarse que no esté tapado con viruta que impida su correcto funcionamiento; cerciorarse de que las cerdas del cepillo alcancen la mitad de la profundidad de la garganta. 

Si llegase muy adentro del cuerpo de la sierra, la vida del cepillo se gastará prematuramente. Si alcanza a tocar apenas la punta de los dientes, este no será capaz de remover la viruta adecuadamente. Es recomendable utilizar cardas con cerdas de acero que son más eficientes que las de bronce o latón. (Pregunta por nuestros cepillos)

  1. Tensión inadecuada

Las sierras cintas siempre deben tener la tensión correcta para evitar problemas en el corte y acabado en material. En el caso de que sea insuficiente, vamos a obtener malas terminaciones, cortes desviados y mayor desgaste en la herramienta. 

Sin embargo, también es importante recalcar que no se debe tener una tensión excesiva, ya que podría quebrarse. La tensión adecuada será proporcionada por tu proveedor y puede ser medida con un tensiómetro (Pregunta por nuestros tensiómetros).

  1. Velocidades de avance y corte incorrectas

Una vez asentada la sierra cinta, para cortar cualquier material debemos seleccionar la presión de corte y la velocidad del avance del cabezal. En las máquinas hay una perilla para el control de la presión. Esta perilla la debemos colocar de acuerdo con el material que cortaremos.  Recuerda que cada material debe ser cortado con una velocidad en específico y con una sierra especial. (Pregunta por nuestros tacómetros).

Si te interesa saber más, nuestros especialistas pueden capacitar a tu personal en el correcto manejo de las sierras cintas y mejorar la productividad en tu empresa. Contáctanos y te haremos llegar una cotización.